Me descubro escribiendo,
ensimismado como siempre,
a la luz de un bello recuerdo.
Justo ése que habla de Ella,
de la llegada del momento
en el que yo mismo decidí,
obsequiarle mi alma entera.
Que se quedara a vivir allí,
al entregársela de lleno;
la intención detrás, era esa,
y la sellamos en cada beso.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario